Uso de containers en la economía circular


Apilables, herméticos, hechos para soportar fuertes vientos y agua, los contenedores son el último producto sostenible para entrar en la economía circular. Son principalmente utilizados para transportar artículos a granel al extranjero. Y para muchos países es más rentable recibir nuevos contenedores de envío que incurrir en el gasto de una devolución. A diferencia del plástico de un solo uso, se evita el desperdicio de contenedores vendiéndolos y reutilizándolos para usos estructurales alternativos.

Desde pequeñas casas prefabricadas hasta hoteles y hostales eco-chic, los contenedores de envío ofrecen una solución creativa para optimizar el espacio a una fracción del costo. La durabilidad de cada unidad tiene una vida útil extendida de 10 a 15 años, y su material ecológico ha elevado las unidades como una solución arquitectónica asequible para el hogar y espacios de uso mixto en todo el mundo.

Estas son algunas de nuestras reutilizaciones favoritas:

Los restaurantes se están preparando para la idea de integrar contenedores de envío en su cartera de bienes raíces. Tacos Oscar en Oakland sirve comida mexicana en un contenedor de envío brillante y colorido que sirve comida para llevar y como cocina completa. Los operadores grandes y pequeños están experimentando para albergar cocinas virtuales gracias a su flexibilidad con la ubicación.

Los desarrolladores de uso mixto están aprovechando la arquitectura de contenedores de envío para revitalizar los espacios urbanos. Por ejemplo, The Detroit Shipping Company es un salón de comidas con sede en Detroit, un jardín de cerveza y un espacio para eventos de galería compuesto por 21 contenedores de envío restaurados. Además, el fácil transporte y desmontaje de los contenedores de envío inspiró a The Container Bar en Austin a crear un ensamblaje que sea adaptable y que pueda reubicarse dentro de la huella evolutiva de la ciudad.

Mientras tanto, en otras partes del mundo, los contenedores de envío están encontrando una nueva vida como prototipos para los centros comerciales. En Corea del Sur, Urbantainer ha desarrollado un complejo de centro comercial construido a partir de 200 contenedores de envío. Common Ground es un corredor minorista modular que aprovecha las capacidades modulares de los contenedores para crear centros experienciales instalable en Instagram para sus ciudadanos.

Un excelente ejemplo local vendría a ser el YOY Lima Box Park, el cual es el primer parque de contenedores, un disruptivo concepto que ofrece experiencias y gastronomía. Fue inaugurado en agosto del año pasado sobre un terreno de 8500 m² junto al centro comercial Jockey Plaza y cuenta con más de 50 marcas perfectamente distribuidas en containers muy bien diseñados, con corredores “instagrameables” y una plaza central donde se realizan conciertos, eventos y activaciones.

Actualidad